Proponemos un aprendizaje participativo y experiencial, donde el aspecto lúdico y la cooperación estén presentes durante toda la formación.

Una formación tanto para los improvisadores profesionales como para las personas que persiguen divertirse con la Impro y aplicarla a su vida diaria, donde la técnica se adapta a las necesidades de cada persona para potenciar su creatividad, libertad y espontaneidad.

Desde la escuela, creemos en los beneficios de la exposición paulatina a los escenarios, apostando por la creación de formatos de Improvisación que los alumnos mostrarán al público durante su formación.